Saltar al contenido

Dichos y refranes con dibujos para niños

A continuación presentaremos algunos de los mejores dichos y refranes que los hispanohablantes usamos en nuestras conversaciones diarias para hacerlas un poco más picantes … ¡y sonar más sabios! ¡Te invitamos a aprender sus significados!

Dichos y refranes populares con dibujos para niños

1. Aunque la mona se vista de seda, mona se queda.

Personalmente, no puedo imaginarme a una mona vestida de seda. En realidad, no puedo imaginarme a ningún mono vistiéndose con nada. Los monos son monos, y tú eres … tú. ¡Tienes que aceptarte tal como eres, sin lápiz labial agregado!



Se recomienda tener cuidado con el uso de este refrán si no quieres que nadie se sienta insultado. Para que lo sepas, la palabra mona puede significar bastantes cosas, «borrachera», entre otras. Entonces, dependiendo de cómo construyas la oración, puedes estar diciendo cosas diferentes.


2. A pan de quince días, hambre de tres semanas.

El humor y la exageración se unen muy a menudo en nuestra vida diaria, y este dicho es un gran ejemplo de ello. Cuando tienes hambre, tienes hambre, y ningún pan de 15 días será lo suficientemente difícil de masticar.



Este dicho también es un recordatorio útil del hecho de que en español nos encanta tener sentimientos en lugar de «ser», a diferencia del inglés. Entonces dices tengo hambre, tengo sed, tengo miedo, tengo sueño, etc. No hace falta decir que también puedes estar hambriento (tener hambre), sediento (tener sed), asustado (tener miedo), pero ¿por qué complicar las cosas?


3. Lavar cerdos con jabón es perder tiempo y jabón.

¡Y una vez más, un animal ha llegado a nuestra lista! Acéptelo, los cerdos no son tan limpios. Huelen muy mal. ¿Por qué querrías lavar a tu cerdo? ¿Por qué? Algunas cosas son solo una completa pérdida de tiempo.



Entonces, ¿cuándo puedes usar este dicho? Imagine que tiene que estudiar 100 páginas para su examen final y comienza a hacerlo la noche anterior. ¡Hora de lavar a tu cerdo, entonces! No hay cantidad de jabón, o incluso tiempo, para ayudarlo a salirse con la suya. Puedes intentar vestirte de seda, pero seguirás siendo una mona …


4. Como el que oye llover.

Hay muchas teorías que intentan explicar el origen de este dicho, pero personalmente creo que la más bella es la relacionada con Hernán Cortés y Moctezuma. Ahora hay una tendencia en nuestro mundo a ignorar lo que dice la gente, a fingir que no nos afecta. Para algunas personas, escuchar cómo caen las gotas de lluvia es tedioso, aburrido e inservible.



Hay una expresión relacionada utilizada por los jóvenes españoles hoy en día que tiene el mismo significado: Me resbala (me la suda), lo que significa que no les importa lo que digan otras personas. No quiero que tengas una actitud de «Me resbala», especialmente cuando se trata de aprender dichos y refranes, pero si tienes ganas de impresionar a tus amigos, no dudes en usar esta expresión. Solo recuerda usarla cuando llegue el momento adecuado, ¡o podría ser como agua corriendo por sus espaldas!


5. No hay burro calvo, ni calabaza con pelo.

Este refrán es divertido, ¿no? En realidad, es uno de mis favoritos, no solo por la expresión en sí, sino por su significado. No sé mucho sobre burros, pero sé que si un burro está perdiendo el pelo, debe tener algún tipo de enfermedad. Las calabazas tampoco son algo de mi día a día, ¡pero me asustaría si encontrara un cabello de calabaza en la vida real! Sin embargo, los hispanohablantes no encuentran ningún tipo de rareza en esta expresión, y la usan como si no hubiera un mañana.



El punto es, hablar sobre lo que sabes, hacer lo que puedes hacer, y punto. Solo sé tú mismo y no finjas saberlo todo.

Es interesante mencionar el uso del No … ni (ni … ni) en esta expresión. Solía ​​decir que tanto el primer como el segundo elemento no existen o no son verdaderos, no … ni tiene un ninguno implícito (ni / ni) que casi nunca se usa en este tipo de combinación (es decir, No hay burro calvo, ni tampoco calabaza con pelo).


6. Con paciencia y con maña, un elefante se comió una araña.

Este refrán significa que poco a poco, paso a paso, podrás lograrlo. No necesitas ser un elefante para hacer esto, ni necesitas comer una araña, pero seguramente necesitas tener paciencia y persistencia si quieres llegar a cumplir tus objetivos.



Hay otra expresión, más corta y quizás más poderosa, que se usa cada vez más hoy en día: Persevera y triunfarás. El significado es el mismo, pero no es tan divertido y gráfico como nuestra frase destacada. Ahora que sabes esto, tal vez creas que puedes seguir enjabonando a tu cerdo hasta que esté limpio. La respuesta nuevamente es que es una pérdida de tiempo. ¡Incluso con este dicho, los cerdos seguirán siendo cerdos!


7. Cría fama y échate a dormir.

Sabemos que es muy difícil perder una mala reputación, incluso si resulta injustificada. Este proverbio significa solo eso: una vez que tienes una mala reputación, no hay nada (o casi nada) que puedas hacer para limpiar tu nombre. Entonces decimos: si van a hablar de nosotros, ¿por qué molestarse? ¡Solo vamos a dormir!

Si echas un vistazo a la segunda parte del dicho, tenemos el imperativo échate a dormir. Hay dos temas gramaticales muy interesantes que podemos revisar usando solo estas tres palabras.



En primer lugar, cuando tenemos un imperativo, los objetos se agregan directamente al final del mismo, por lo tanto, échate (acostarse), o lávate (lávese), durmámonos (vamos a dormir), bebámonoslas (bebamos), etc. En segundo lugar, tenemos la perifrasis echarse a + [infinitivo], lo que significa comenzar a hacer algo. Eche un vistazo a lo útil que puede ser esta perifrasis:

  • Cuando lo vi, me eché a correr. (Cuando lo vi, comencé a correr).
  • Se echó a llorar cuando oyó la noticia. (Se echó a llorar cuando escuchó la noticia).

Nota final: Ningún animal resultó dañado en la explicación de este dicho español.


8. Quien fue a Sevilla, perdió su silla.

Este es uno de esos dichos que tienen ese sabor multipropósito que más me gusta. Se puede aplicar no solo al hecho de que si deja su asiento desatendido puede perderlo, sino también a cualquier otra situación en la que deje algo desatendido (una bolsa, un plato de sopa, un privilegio de algún tipo) y al regresar encuentre a alguien que lo haya agarrado.



Tenga en cuenta que la estructura de estas frases es muy común en los proverbios españoles. De hecho, tenemos cientos de proverbios que comparten este tipo de construcción: Quien + [cláusula], [cláusula], pero también se puede usar en conversaciones cotidianas:

  • Quien termine su examen puede irse.
  • Quien llegó primero ganó un premio.

Si observa más de cerca los ejemplos anteriores, se dará cuenta de que este tipo de construcción puede activar tanto el infinitivo como el subjuntivo. Recuerde la regla: si es un hecho, indicativo, pero si aún no ha sucedido, será todo subjuntivo.


9. Ojos que no ven, corazón que no siente.

Hay mucha discusión entre los hispanohablantes sobre el significado real de este dicho, y supongo que cada uno de nosotros lo usa de manera diferente dependiendo de dónde crecimos. Prefiero la traducción «Fuera de la vista, fuera de la mente» porque parece estar más cerca del significado literal en español. Si no ves lo que está sucediendo, no lo piensas, así no te preocuparás.



Sin embargo, interpretarlo como «Mucho tiempo ausente, pronto olvidado» también podría ser posible si eres un romántico. Ya no ves a tu ex, así que la olvidas rápida y fácilmente.


10. Las palabras se las lleva el viento.

Creo firmemente en este dicho. No quiero hablar por hablar, quiero que demuestres que quieres decir lo que dices, ¡así que comienza a moverte!. Cuando digo o escucho este proverbio, siempre pienso en la película «Lo que el viento se llevó». Recuerdo que me gustó mucho el título de esta película cuando la escuché por primera vez. Pensé que era muy romántico y melancólico al mismo tiempo, y pude aprender que las cosas se van con el viento.



11. No hay mal que cien años dure, ni cuerpo que lo resista.

Ahora este dicho puede no ser divertido a primera vista. Tenemos, por supuesto, la esperanza de que nuestra situación cambie y los malos tiempos no duren para siempre, pero ¿cómo puede ser divertida la esperanza?

La parte humorística proviene del hecho de que puedes cambiar este dicho para que sea adecuado para la situación por la que alguien está pasando. Dado que hay innumerables situaciones, también puede haber innumerables versiones para este proverbio, que es cuando comienza la diversión y la locura.


 

Obviamente, necesitas encontrar el momento adecuado para usar este dicho, y debes decirlo sarcásticamente o irónicamente, de lo contrario no será divertido en absoluto, y tu amigo incluso podría enojarse contigo. Sin embargo, cuando lo usas correctamente, ¡debería darte muchos puntos de bonificación!